viernes, 6 de mayo de 2011

Esquizofrenia: identificación genética a través de la piel

La Esquizofrenia es un diagnóstico psiquiátrico en personas con un grupo de trastornos mentales crónicos y graves, caracterizados por alteraciones en la percepción o la expresión de la realidad.Un equipo del Instituto Salk de Estudios Biológicos (La Jolla, California) ha logrado, gracias a la reprogramación celular, estar un paso más cerca de comprender la biología que se esconde tras esta enfermedad. Y ha constatado que, sin duda, la esquizofrenia es "un trastorno genético". El equipo, que publica su investigación en la revista Nature, aisló células de la piel de cuatro esquizofrénicos. Utilizando las técnicas de reprogramación las convirtieron en células iPS (células pluripotenciales inducidas), que se caracterizan porque se pueden transformar en cualquier tipo celular del organismo y las cultivaron para que se transformaran en neuronas. Esta técnica permite retroceder en el tiempo y llevar células adultas a un estado simliar al de las células madre embrionarias.

Repitieron el mismo proceso con personas sanas y después, compararon las neuronas conseguidas de unos y otros. "Encontramos que las neuronas de los esquizofrénicos eran diferentes y se conectaban peor entre sí", indica Kristen Brennand, otra de las autoras. "Nadie sabe hasta qué punto los factores ambientales pueden contribuir al desarrollo de la esquizofrenia, pero al fabricar este modelo hemos podido sacar ese aspecto de la ecuación y centrarnos sólo en las causas genéticas y biológicas", señala la investigadora. Así, "identificamos casi 600 genes cuya actividad estaba mal regulada en las neuronas aisladas de los pacientes esquizofrénicos. El 25% de estos genes ya se habían relacionado con la enfermedad anteriormente, pero los otros no", dice Brennand.

También aprovecharon este modelo, que es la primera vez que se consigue de una enfermedad mental compleja, para probar la eficacia de los fármacos. Tras administrar diversos antipsicóticos descubrieron que sólo loxapina aumentaba la capacidad de las neuronas para establecer conexiones con sus vecinas y también afectaba a la actividad de varios genes.

Asimismo, este modelo, que es una de las principales aplicaciones de las células iPS, se puede repetir con otras enfermedades mentales que siguen siendo un misterio, como el autismo o el trastorno bipolar. Ya se hizo algo similar hace un mes para el Parkinson.




Fuente: El Mundo, Wikipedia.

No hay comentarios:

Publicar un comentario